EL KARMA

Piedrecillas en el camino y los pies descalzos,

todo indica que hay una ruta clara,

es angosta y hiere los pies.

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Antiguamente arrojé piedras hacia el futuro.

Hoy inevitablemente he de pisarlas,

¿Alguna queja?

.

...Adviene otra cosa,

magma en el camino...

no hay manera de soslayar

aaaaaajjjjjhhhhh!!!

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Antiguamente lancé lava sobre mi futuro

con el ceño fruncido, con carcajadas la disparé,

¿Alguna queja?

.

Una hermosa dama en el camino.

La tomo de la cintura y la beso.

Luego desaparece.

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La envié yo mismo desde el pasado,

para que me atrajera y me exprimiera el corazón.

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Fui mi ancestro,

y lancé semillas al futuro,

raíces filosas como hojas de dagas.

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Yo mismo las sembré.

Sangrando los pies,

camino por la angostura.

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Mi visión llega lejos,

he recorrido milenios de existencias.

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¿Se entiende la idea?

cavé trampas que hoy piso.

¿tengo derecho a quejarme?

.

Esta vez he nacido hijo de la balanza

y estos temas no se me hacen extraños.

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Disfruto del obstáculo,

acelera el proceso del regreso.

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Por los anchos caminos llenos de hologramas

quizás nunca llegue al horizonte

que queda atrás del horizonte.

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Por ello anhelo toparme con las bestias

que lancé desde el pasado.

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Así asesino el ancestral defecto,

y alivio mi camino.

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Espada en mano y ojos bien abiertos,

esto está difícil e interesante.

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Veo un deprimido...

uno que no goza de interpretar sus escenas.

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¡que se transforme en Artista!

(raza extinta a la cual No tengo el honor de pertenecer)

sin temor, sin prejuicio;

que goce del más mínimo dolor,

lo plasme en sus cuadernos

y estudie la ciencia que nos rige.

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Luego veo una nube,

¿por qué vuela y se desplaza hacia el norte?

Justo en el momento

en que se enciende, rojo, el horizonte.

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Dedicado a todos ustedes, si es que sufren algún dolor, y a Li Po, poeta chino del siglo VIII, que escribía durante su peregrinación solitaria y embriagada, inspirado, profano a veces, entre montañas, arroyos y hierbas.